miércoles, agosto 29, 2007

NOTICIA 321ª DESDE EL BAR: EL INFORME DE LA RUTA DE LA SEDA ANTES DE LA EDAD MEDIA (y 5)

Me hubiera gustado poder ir a algún concierto o espectáculo de humor o teatro de las fiestas de este año, pero el ayuntamiento decidió este mismo año quitar las sesiones de Las Noches Golfas del Huerto de los Leones. Esos espectáculos no estaban nada mal y eran asequibles y accesibles. Empezaban a partir de las doce de la noche, aunque solían retrasarse una media hora o cuarenta minutos, en lo que en siglos pasados fue el huerto de la Catedral Iglesia Magistral de San Pedro y San Pablo o de los Santos Niños Justo y Pastor, que hoy día es un parque al que se le dotó de infraestructura al aire libre para albergar eventos públicos en pleno centro de la ciudad. Al salir de mi trabajo a las 00:30 h. (12:30 a.m.) esta semana, de lo único que me estoy enterando de las fiestas es de lo que leo en el programa, me cuentan, veo a través de la puerta del trabajo que da a la Plaza de Cervantes, y del ambiente nocturno de las peñas y de las ferias (hay muchas chicas preciosas en estas ferias andando por ahí, lástima que lo hagan dando tumbos para vomitar). Yo también quiero mis fiestas de Alcalá de Henares... Al menos libro el sábado y el domingo, lo que me permite disfrutar desde la noche del viernes en profundidad del final de los festejos (a falta de poder ver algún espectáculo que no sea sólo el pirotécnico de cierre de fiestas), aunque no puedo negar que tras el trabajo estoy saliendo con amigos diversos a tomar algo metidos en el ambiente festivo. Definitivamente creo que al ayuntamiento hay que decirle que hay que mejorar y dar satisfacción a todos los que somos de aquí por igual, como otros años.

En fin, os dejo la última entrega del informe de la ruta de la seda antes de la edad media. Un saludo y que la cerveza os acompañe.

EL INFORME DE LA RUTA DE LA SEDA ANTES DE LA EDAD MEDIA (y 5)

6. RUTAS ARTÍSTICAS.

Buena parte de este apartado ya está comentado en cuanto a la importancia del papel de la simbología y en cuanto a la función que el arte desempeñó en la expansión de la religión. Quedaría seguir el rastro de ese arte.

Dado que ya hemos comentado la creación de monasterios budistas a lo largo de la ruta es de suponer que estos siguieron unas pautas de construcción similares, lugares en contacto con la naturaleza, salas para la meditación, etc.

Sin embargo es mejor seguir la pista a las rutas del arte por lo que se conoce por arte grecobúdico. Este se creó con la aceptación del Gran Vehículo. Representaban a Buda y su vida, del mismo modo que en occidente se representaban narrativamente los mitos de los dioses grecorromanos, o, posteriormente, la vida de Jesús de Nazaret. El nombre de grecobúdico le viene al ser una mezcla del arte griego clásico y arte propio de la India puesto al servicio del budismo. El arte griego clásico presentaba figuras estilizadas, atléticas, humanizadas en sus expresiones, de rostro apolíneo (nariz recta, pelo rizado, ligera sonrisa) y siguiendo unos cánones precisos. Además representaban escenas de la vida de algún dios o personaje de una forma ordenada. Mientras que el arte propiamente indio era más curvilíneo, más voluptuoso, con muchos elementos poco humanos en la mayor parte de las representaciones sagradas... Además no seguía un orden a la hora de representar mitos o cualquier otro tipo de historia. Las normas griegas, como hemos dicho, se mezclaron con las indias y se comenzaron a representar escenas de Buda, lo que no quita que existiesen imágenes de Buda que no fuesen grecobúdicas (aunque también iniciadas con el Gran Vehículo).

Las primeras representaciones de Buda le mostraban con túnicas típicamente occidentales. Además Buda era tratado como ser humano y no divino, pese a que ya en esa época pudiera pensarse que lo era. Sólo un poco más tarde empezó a representarse de una forma divinizada o bien en continua meditación con una ligera sonrisa. Estas representaciones comenzaron en la zona de Magadha y se fueron expandiendo hasta llegar a Kushan, desde donde entraron a China.

Algunos investigadores dudan de si la influencia clásica mediterránea en India era griega, romana o con tintes iranios. Todos han visto un poco de lo que han tratado de defender. Pero aquí quizá sea mejor no adentrarse en ese planteamiento y defender el punto de vista de que, al fin y al cabo, las características básicas que se exportaron fueron las clásicas griegas y esas fueron las que nos han permitido seguir la pista de las rutas del arte. Hay quien afirma que la influencia griega viene de los yavanas, que, recordaremos, eran los griegos que se habían quedado aislados en esa zona del planeta tras perder su reino en Bactriana. Estos se habrían trasladado a la zona Indogangeática. Lo que coincide con el lugar de origen del arte grecobúdico, pese a que las fechas “bailen” demasiado.

Con los Kushan, con Kanishka, tomó fuerza este arte en la zona de Gandhara. Es una época de fuerte flujo comercial en el lugar. En Surkh Kotal, al norte del Hindu Kush, aparece un templo budista con columnas corintias. Y diversas piezas de bronce con decoración típicamente griega. Es más, se han hallado piezas artísticas de influencia griega más que budistas tendentes al sincretismo religioso, lo que ha hecho que se hable de un arte grecobactriano. Sea como sea, esos elementos permitieron el paso de ese arte, y con él el del budismo, hacia China.

Se duda de si estos artistas habían llegado hasta esas tierras y seguían un viaje por el mundo, o si habían fundado una escuela que formara a otros artistas autóctonos, o si bien realmente eran yavanas que habían conservado parte de su cultura. Sea como sea, sus piezas grecobúdicas se han hallado en la frontera de intercambio con China, en la región de Lob nor, en la ruta que unía Kashgar con el desierto de Tlakamakán. Un monje budista del siglo V, chino, ¿Fa Hian? Dice que allí todos eran budistas y hablaban la lengua india. La arqueología ha descubierto un viejo monasterio, de la época de los Han, con restos de pinturas del siglo III, y con restos de telas con representaciones, y de tejas pintadas, que muestran elementos clásicos mediterráneos con elementos budistas. Todo un hallazgo para el proceso de seguimiento de la ruta del arte de India a China. Una vez más se muestra que siguió la ruta de la seda, la cual fue básica para conectar estos dos mundos. El lugar donde se haya este descubrimiento se llama Miran. Pero en el Mekong, que tuvo influjos de la política china, se han hallado restos similares en Oc-eo.

El asunto se remata cuando se sabe de la existencia en china de pequeñas características occidentales en su arte.

7. CONCLUSIONES.

Mis intenciones al crear este trabajo no han sido en absoluto difusionistas. Cuando las civilizaciones india y china empezaron a tomar contacto ya tenían culturas bien asentadas y establecidas, así mismo con occidente. Sin embargo, el contacto entre los pueblos siempre trae consigo mezclas culturales, ideológicas, étnicas, lingüísticas, comerciales y de otra clase, que terminan siendo interesantes y provechosas, sino en todo, en algunos casos, sí en bastantes aspectos.

Las relaciones políticas permitieron abrir una ruta comercial desde Europa a los confines de Asia que permitieron el conocimiento de zonas inimaginables. Aunque pasarían siglos de incomunicación y desencuentro, sería este periodo de la antigüedad el que con sus relatos animaría a nuevos viajeros a buscar esos mundos lejanos. Gente como Marco Polo, Vasco de Gama o Cristóbal Colón, abrirían de nuevo el contacto perdido y ampliarían con sus descubrimientos los conocimientos geográficos.

La ruta comercial había dado numerosas historias fantásticas que llenaron la literatura y la imaginación de numerosas generaciones de seres humanos, y e cierto modo sigue haciéndolo. La prosperidad y el lujo de las cortes indias y chinas se entienden mediante sus contactos. Mientras que la exportación de la seda o de las especias, tanto en la edad antigua como en épocas más modernas, fueron toda una revolución mercantil e industrial que afectó economías, formas de vivir, maneras de trabajo, relaciones internacionales...

Cuando las grandes épocas de epopeyas comerciales cedieron el paso a las épocas de la religión, el contacto India y China es básico para entender el mundo oriental actual. El budismo ha dejado una fuerte impregnación allá por donde pasó y se asentó. La mentalidad de ambos pueblos, tan distante y fascinante para nosotros los occidentales, no se puede explicar sin ese budismo, el cual permitió el encuentro entre ambos mundos en estas épocas. Sólo en las últimas épocas parece que estas religiones orientales (todas las derivadas del budismo, o el mismo budismo, o el taoísmo, o el confucionismo) empiezan a interesar seriamente al mundo occidental. Los textos que han guardado esas ideas religiosas y filosóficas pudieron conservarse gracias a las peregrinaciones chinas a la India en busca de textos para copiar y guardar.

Y el arte siempre ha sido un elemento de unión entre los pueblos, porque desde el lujo a las historias que hay que transmitir a la población analfabeta, se valen de representaciones artísticas. La belleza misma de los objetos del artista (escultura, arquitectura, pintura, relato, poema, música, danza, o cualquier otra forma artística) es siempre preferible a cualquier acto desagradable, como pudiera ser la guerra, aunque por desgracia estas también se produzcan.

El contacto India y China no sólo se afectó a sí mismo, sino que alcanzó a otras regiones como Indochina, Indonesia, Corea, Manchuria, Japón, multitud de islas a lo largo de esas costas o Nepal. Y esos mundos tampoco serían explicables sin conocer los frutos que los contactos indo-chinos habían dado. Pues India transformó China y China a India.

1 comentario:

Canichu, el espía del bar dijo...

Tan sólo añado a modo de post data que el presente trabajo ha sido sobre la ruta de la seda antes de la edad media, lo cual no es un dato baladí. La ruta de la seda que más fama adquirió en la actual consciencia humana es la medieval, la cual se abría y cerraba intermitentemente según las realciones entre los reinos cristianos de Europa y los musulmanes de Asia, siendo el caso más famoso el de Marco Polo, cosa que ya he dicho, y siendo también famoso que el cierre a los occidentales europeos del acceso a la ruta por parte del Imperio Turco en 1453 provocó la exploración en busca de nuevas rutas a la India, China y Japón que dieron por resultado la exploración de las costas de África, el descubrimiento de América y el de Oceanía.