domingo, noviembre 25, 2012

NOTICIA 1161ª DESDE EL BAR: DEL CANTE FLAMENCO A LA JOTA SEGOVIANA, PASANDO POR GONZALO LECHÓN

Hoy había una propuesta interesante en un bar antiguo en Alcalá de Henares, aunque sospecho que con nueva dirección desde hace meses (al menos desde la Noche en Blanco). El nombre está cambiado del que yo recuerdo, creo. Se trata del café-bar Las Retintas, en la Plaza de los Irlandeses, número 9. La propuesta era la inauguración de una exposición de pintura de un artista local del que comentaré un poco más abajo. Cabe reseñar ahora que la inauguración venía acompañada por un recital de canción flamenca pura a cargo de El Carbonilla con David del Agua "Alegría de Vivir" a la guitarra. La hora era la de comer, por lo que el bar servía enormes tapas de migas y de cocido madrileño con la bebida. El Carbonilla y David del Agua ya han hecho varios recitales de flamenco en Alcalá de Henares desde al menos 2011, probablemente desde antes pese a que yo le descubriese el año pasado. El arte flamenco de El Carbonilla suele atraer gran número de gente, sobre todo por la noche, y en esta ocasión, gracias a una hora diurna, pudieron estar presentes numerosos familiares y amigos suyos, lo que hizo de este recital algo muy especial. No fue convencional en el sentido de que no fue un recital de seguido, como nos tiene acostumbrado, sino con diversos parones entre canciones para ir dando un respiro al público y pudiera ir viendo los cuadros de la exposición y consumiendo algo de beber. Hay que decir que el público estuvo muy entregado. La pareja flamenca no sólo tiene gran calidad sino que además es altamente contagiosa y alegre. Si que es verdad que una determinada parte del público, un grupo reducido del fondo del bar, no fue demasiado educada y respetuosa al no parar de armar alboroto de voces altas incluso cuando se les pedía silencio. Nunca terminaré de entender a esta gente, si algo no te gusta o si no lo estás disfrutando es tan sencillo como salirte del bar o bien repetar a la inmensa mayoría que sí lo estábamos viviendo otorgando tu silencio par dejar oir al maestro del cante (para mí lo es) y al maestro de la guitarra (que dadas algunas florituras de digitación que hace a veces, para mí me demuestra serlo o estar en vías de ser un señor maestro). Escuchar flamenco es algo que a una parte de la población le resulta difícil o que alega que no lo entiende. No es tanto una cosa de entender (aunque entendidos los hay), como de sentir. Y desde luego se siente hasta la raíz un cante flamenco en vivo y en directo y la energía que suele trasmitir, más en voz de El Carbonilla, que como buen cantaor sabe improvisar sobre las báses standard del flamenco que llena de decoraciones sonoras David del Agua.  se siente, y se siente profundo. No es un flamenco triste el suyo, como el que le escuché en Cádiz este año a otro cantaor, cuya temática era en torno a la muerte de modo continuo. Y desde luego, me siento muy honrado al haber escuchado en este concierto a El Carbonilla improvisar y cantar una estrofa dedicada exclusivamente para mí. Gracias, si estás leyendo esto. Es muy recomendable escuchar uno de sus recitales. Id, que no os defraudará nunca.


Pues el recital en Las Retintas, como dije, tenía por motivo la inaguración de pintura "Hecho Pedazos", de Gonzalo Lechón. Este artista alcalaíno es un pintor bastante reconocido que cuenta con algún premio de pintura, me parece. Ha expuesto en este año en el bar La Chata (donde permanentemente se exhibe un boceto en cuadro de un mural que hizo para la antigua La Chata) y en el El Perro Verde. previamente a la nueva exposición que se puede ver ahora mismo en el café-bar Las Retintas de la Plaza de los Irlandeses, pero también, por ejemplo, en Toledo. Entre la gente que fue a verle estuvo la también pintora Zaida Escobar, con quien mantuvo una interesante conversación técnica sobre cuadros, y con quien tiene cierta cercanía en al menos un cuadro de la presente exposición, un óleo grande sobre un retrato de un cataor flamenco al que el artista considera un Señor del arte flamenco, por lo que le retrató como si fuera un Señor nobiliario de los de otras épocas. La exposición se compone de unos ocho cuadros, fundamentalmente mayoría de serigrafías. Hay dos litografías, como la que os muestro con una lamentable calidad fotográfica culpa de la cámara incorporada en mi teléfono móvil. La litografía me llama especial atención. Últimamente trabajo describiendo numerosos programas de mano de cine creados con litografías. El dibujo se crea y graba en una piedra, sobre la que se esparce los pigmentos colores que han de colarse en los trazos grabados, de ese modo cuando con un rodillo de máquina se estampa un papel, o otro material, se queda impreso el dibujo creado. Obviamente, como pasaba en los grabados que expliqué con Goya, el artista graba en negativo para que la imagen quede en positivo, del mismo modo no hay dos litrografías iguales, ya que la cantidad de tinta, la presión del papel y otros factores hará que cada impresión que cree el artista tenga el sello suyo a la hora de aplicar la técnica unido a otros factores aleatorios que se deben a la física (la presión y esas cosas), pero que no son casuales, ya que el artista los conoce bien y sabe manejarlos. También aquí os recomiendo pasar a ver la obra de Lechón.



 Pues todo esto lo ha ofertado hoy el citado café-batr Las Retintas, donde los fines de semana (al menos) es bastante ideal para poder disfrutar de su tapeo generoso a la hora del vermut. Aparte, se puede disfrutar de una lámpara tan femenina como ésta, o bien... 

...de mesas tan sugerentes como ésta. Me parece especialmente de agradecer siempre estos bares de Alcalá que se interesan por mantener y ofrecer esa vida cultural de la que organismos oficiales se olvidan. Dan así una oportunidad de mostrar y expresar a numerosa gente su obra. Así por ejemplo, el recital de El Carbonilla hubiera estado más valorado quizá si hubiera sido en un bar de Cádiz (donde por cierto, hay un museo de la litografía en la Puerta de Tierra, retomando lo de la exposición de Lechón). Pero no por ello hay que menospreciar los bares que se atreven a programarle, con éxito, por cierto, siempre va mucha gente a verle. La verdad es que Alcalá de Henares tiene unos 210.000 habitantes y su vida cultural, pese al tópico, es muy rica y variada, sólo que tiene la desgracia y la suerte a la vez de estar a treinta kilómetros de Madrid capital, y ante eso toda comparación es horrible.

La cosa es que después, sobre las 19:00 horas, venía el poeta Luis García Montero, como dije cuando le conocí en persona: un señor poeta. Tal vez cuando sea mayor le den un día el Premio Cervantes, para mi gusto es el mejor poeta vivo que tiene actualmente España.  Vino a presentar su nuevo libro, "No me cuentes tu vida", en la Universidad de Alcalá de Henares, en el rectorado. La entrada era gratuíta. Yo quería verle, volver a  hablar con él, pero tuve una confusión en la hora y, además, quería ir previamente a ver a una amiga castellano-leonesa que hoy bailaba en el centro Castellano-Leonés de Alcalá de Henares (en el antiguo matadero del siglo XIX, hoy sede de las Casas Regionales). Así que al final vi completo el acto de Castilla y León, que había organizado una jornada para mostrar cantos y bailes de diferentes regiones de sus tierras. En lo referente a Segovia bailaba mi amiga. Bailaron una jota segoviana (ignoraba que tuvieran jotas, pero parece ser que Ávila también las tiene) y otros bailes regionales como "los palos" y "las cintas". Una presentadora explicó entre acto y acto el sentido de cortejo en unos casos, de posible baile guerrero en otro, de fiesta agraria en otros... Muy instructivo. Y los trajes muy bonitos, casi señoriales de otros siglos, más que campesinos, pero muy bonitos. La bailarina que es mi amiga, Pilar Gómez, bailó muy bien en un grupo donde había más mujeres que hombres; pero es siempre entrañable y precioso su afán por mantener sus tradiciones a la vez que se divierten, y sin renunciar, igualmente, su presente y componente actual de madrileños alcalaínos. 

En serio, hoy en Alcalá de Henares había una buena oferta de actividades prácticamente sin necesidad de gastar dinero, o sin necesidad de ello en al menos dos de esas actividades. Un saludo, acordaos de mis recomendaciones con El Carbonilla y Lechón, y que la cerveza os acompañe.

4 comentarios:

Canichu, el espía del bar dijo...

Pues parece que el anuncio de que venía el domingo García Montero, ayer, estaba mal en la prensa local. Hoy uno de esos periódicos anuncia que es hoy lunes cuando viene a presentar su nueva novela, que está ambientada en Alcalá de Henares.

http://www.diariodealcala.es/actualidad/cultura/item/183-luis-garcía-montero-presenta-su-novela-alcalaína

iralow dijo...

apetece estar por allí...lástima que ahora me pille tan lejos :)

besoteeee

Canichu, el espía del bar dijo...

Pero tu ciudad también tiene lo suyo. Saludazo.

iralow dijo...

no está tan mal, hasta que terminen de cargársela...como tantas otras...

besote